FIRME EN LAS PROMESAS DE JESÚS

Por más hermoso que sea nuestro caminar con Jesús, hay momentos en los que podemos sentirnos desanimados. Ya sea por situaciones cotidianas, por adversidades en el ministerio, por problemas de salud o financieros, o incluso por una apatía que no sabemos explicar. Pero, sin importar el escenario, siempre es alentador volver la mirada a lo que la Palabra de Dios ya ha dicho sobre nosotros. Recordar sus promesas nos da fuerzas para seguir adelante.

Hace unos días, mientras meditaba en la Palabra, me encontré con este versículo que tocó profundamente mi corazón:

“Escúchenme, descendientes de Jacob, todos los que permanecen en Israel. Los he protegido desde que nacieron; así es, los he cuidado desde antes de nacer. Yo seré su Dios durante toda su vida, hasta que tengan canas por la edad. Yo los hice y cuidaré de ustedes; yo los sostendré y los salvaré. ¿Con quién me compararán? ¿Quién es igual que yo?” (Isaías 46:3-5)

¡Qué maravilloso es saber que Dios nos ha protegido desde antes de nacer! Aún más impactante es entender que el mismo Creador de los cielos y de la tierra nos dice personalmente: “Yo seré tu Dios durante toda tu vida."

¿Te das cuenta de lo profundo de esta afirmación? El Dios eterno, fiel y todopoderoso, promete estar contigo en cada etapa de tu vida. Y lo reafirma con su carácter inmutable.

“Dios no es hombre, para que mienta, ni hijo de hombre para que se arrepienta. Él dijo, ¿y no lo hará? Habló, ¿y no lo ejecutará?” (Números 23:19)

Que esta verdad te fortalezca hoy. Que el Dios de Abraham te impulse a volver tus ojos a Su Palabra, a aferrarte a ella con fe y a seguir caminando con esperanza, sabiendo que Él cumple todo lo que promete.

Un abrazo,

Priscila Leal